Discurso del Trono: El rey Mohammed VI insiste en la unidad frente a los desafíos
Este domingo el rey Mohammed VI se dirigió a la nación con motivo del 19 ° aniversario de su ingreso al trono. El Soberano ha elegido hacerlo desde El Houceima, que es un mensaje fuerte en sí mismo. Así, las primeras palabras del Soberano se dedicaron al deber de cada ciudadano marroquí hacia su Nación. “El pacto sellado entre los reyes de este país y sus hijos, siempre será una barrera infranqueable erigida en torno a Marruecos para protegerlo de las maniobras de los enemigos y las amenazas de todo tipo”.
Después de recordar que el Reino ha sido, a lo largo de su historia secular, un país providencialmente unido y una nación armoniosamente soldada, en todo momento y en todas las circunstancias, el Soberano ha lanzado esta frase que será recordada: “Porque Marruecos es nuestra patria, nuestro hogar común, es nuestro deber para todos proteger y contribuir a su crecimiento y desarrollo”.
El rey Mohammed VI también recordó que el patriotismo, cuando es genuino, se esfuerza por fortalecer la unidad y la solidaridad, especialmente en tiempos difíciles. El soberano afirmó que estaba convencido de que los marroquíes no permitirían que los negativistas, los nihilistas y otros ilusionistas usen el pretexto de ciertas disfunciones, para atacar la seguridad y la estabilidad de Marruecos o para menospreciar su adquirido y sus logros. “Continuaremos caminando juntos y trabajando mano a mano para superar las dificultades objetivas a corto plazo, y así crear las condiciones para la continuación de programas y proyectos de desarrollo, generando empleos y garantizando una vida digna”, dijo.
El gobierno enfrenta sus responsabilidades
Al insistir en la acción colectiva, planificación y coordinación entre las instituciones y las partes interesadas, especialmente entre los miembros del gobierno y las partes que lo componen, el Soberano mantuvo que los líderes políticos son los que se colocan al costado ciudadanos, tanto en los buenos como en los malos días. También hizo hincapié, una vez más, en la necesidad de la participación del partido con los ciudadanos y la importancia de renovar las élites, los métodos de trabajo y el funcionamiento dentro de las formaciones políticas.
Al igual que cada uno de sus discursos, el Rey Mohammed enfatizó el aspecto social. “El tema social está recibiendo toda mi atención y me atrae tanto como Rey y como hombre”, aseguró, recordando que el tamaño del déficit social y la forma en que la justicia social y territorial se encuentran entre las principales razones que lo impulsaron a pedir la renovación del modelo de desarrollo nacional en el discurso de apertura del Parlamento.
En este sentido, el Rey Mohammed VI enfatizó la coherencia general de los programas sociales lanzados y elogió la nueva iniciativa del “Registro Social Único”. Esta herramienta permitirá determinar, de manera rigurosa, los hogares con derecho a beneficiarse de los beneficios sociales. El Soberano también solicitó una reestructuración exhaustiva y profunda de los programas y políticas nacionales de apoyo y protección social, basados en un enfoque participativo. Mientras tanto, instó al gobierno a poner en práctica las medidas de emergencia necesarias, incluyendo el lanzamiento de la tercera fase de la Iniciativa Nacional de Desarrollo Humano (INDH) y la revisión del sistema de cobertura médica dedicada a los pobres “RAMED “.
Diálogo social e inversiones
El Soberano consideró que el diálogo social no es solo un deber, sino una necesidad. Por lo tanto, insistió en su establecimiento y mantenimiento a lo largo del tiempo sin interrupción. Además del clima social, el Rey Mohammed VI se reafirmó en su voluntad de mejorar el clima de negocios, con la adopción de la Carta de Desconcentración Administrativa, antes de finales de octubre, el respaldo de la nueva Carta de Inversión y activación de la reforma de los Centros Regionales de Inversión. Todo con la adopción de textos legales en el sentido de acelerar los procedimientos administrativos. El objetivo es impulsar la inversión, la creación de empleo y reducir la burocracia y la corrupción.
El Soberano concluyó su discurso subrayando que el futuro de Marruecos, como su pasado y presente, es responsabilidad de todos: “Es juntos que enfrentaremos los nuevos desafíos y realizaremos las aspiraciones que apreciamos. Por otro lado, nada se logra sin la unidad, la solidaridad y la estabilidad del país, sin fe en la comunidad del destino que nos une en la alegría y la tristeza, sin patriotismo sincero y civilidad responsable “.
